Se acostó pensando en lo bonito que sería un gesto por su parte como aquél que había visto hacia un rato... pero ahora, ya no era el momento. Estaba lejos. O eso pensaba. El gesto que ella recibió fue mucho más gratificantes. Ahora el tiempo avanzaba a la misma velocidad, el calor seguía bañando insufriblemente la ciudad y los apuntes se amontonaban en el escritorio, aún no estaba segura de nada de lo que se llevaría en la maleta... pero todo se veía de manera diferente.
Seguía sin poder evitar echar una ojeada de vez en cuando a ciertos recuerdos, pero ya sólo eran eso, recuerdos, su conciencia tranquila y el sol poniéndose tras los edificios, algo bonito, pero nada comparable, a como sería contemplar esa misma escena desde la playa en tan sólo unos pocos días, y es que todo cambia mucho según la perspectiva con que se observe, o sin tan si quiera eso. Tan solo es necesario verlo desde el punto de vista adecuado, para evitar que nada te sobrepase. Que nada te haga daño.
Seguía sin poder evitar echar una ojeada de vez en cuando a ciertos recuerdos, pero ya sólo eran eso, recuerdos, su conciencia tranquila y el sol poniéndose tras los edificios, algo bonito, pero nada comparable, a como sería contemplar esa misma escena desde la playa en tan sólo unos pocos días, y es que todo cambia mucho según la perspectiva con que se observe, o sin tan si quiera eso. Tan solo es necesario verlo desde el punto de vista adecuado, para evitar que nada te sobrepase. Que nada te haga daño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario