martes, 30 de septiembre de 2014

Tarde o Temprano.

Se me acumulan las canciones bonitas y sin destinatario con quién compartirlas. Son muchas, las tardes de domingo desperdiciadas, y aumentan las noches de soledad. 
Esa sensación que desde hace demasiado tiempo se mantiene ausente. 
Las sonrisas diferentes, ese brillo en la mirada, no dan señales de vida...
Quiero repetir todo aquello, pero lo quiero de una forma autentica. Sin miedos. Sin prisas. Sin etiquetas ni ataduras... En definitiva, volver a sentir. 
Todo llega, eso dicen y puede que el dejar de esperar haya sido la mejor decisión que pude tomar, aunque es innegable que unos días pesa más que otros ese vacío y la cabeza busca donde no debe. Menos mal que ahí esta el corazón. Con su doble cadena, su coraza y sin llave, para hacer distinguir entre lo que merece la pena y lo que no.
Es bueno aprender a no compartir ciertas cosas, es bueno el no necesitar compartirlas. No depender de otra persona para ser más o menos uno mismo, a pesar de que se eche de menos ese tipo de apoyo.
De todo se aprende y sé que tarde o temprano, el karma dará un giro de 365º y todo será diferente.


viernes, 19 de septiembre de 2014

Demasiado...

...
Demasiado es lo pronto que te fuiste y demasiado es, todo lo que te echo de menos.
Nunca se lo he dicho a nadie, ni si quiera a ti directamente, aunque algo me dice que lo sospechas. 
No sé de que forma, pero intuyo que lo sabes, que para ti no es nada nuevo el saber que la rabia me come por dentro. Y aunque no lo sé a ciencia cierta, algo me dice que si siguieses aquí, todo sería diferente.
Pero la vida es así. Así de injusta.
No pudimos despedirnos, y aunque me duela, no tengo un ultimo recuerdo tuyo. Tengo muchos, de todos aquellos años que pasamos más cerca de lo que suelen llamar común, pero no son nada comparados con todo lo que nos quedaba por vivir. Sobre todo a ti, que acababas de empezar a vivir.
Sí, tu vida empezaba, todo lo anterior, no era vida, era un constante esfuerzo y sacrificio por sacar tu negocio y tu familia adelante, y justo cuando tenias todo el tiempo por delante para comerte la vida, ella te comió a tí y te arrebató de nuestro lado.
Si estuvieses aquí, aunque creo que desde algún lugar no nos quitas ojo... , hubiésemos disfrutado mucho más de todo y creo que, ese apoyo que tantas veces echo en falta, hubieses sabido aportármelo sin duda alguna. Quizás no me sirva el de nadie, porque no es el tuyo.
Creo, que estarías bastante orgulloso de muchas de las cosas que he conseguido, y que también, me hubieses echado la charla necesaria para conseguir las que aún están sin tachar en mi lista de metas a alcanzar...
No debería, pero cada día me cuesta más el no pensar en un "si el estuviese aquí..."
Me haces falta, muchísima. Demasiada. Cada día, cada segundo que pasa, más.
Todas las lágrimas que en su día no supe derramar, caen ahora a borbotones cuando te recuerdo.
Demasiado pronto, demasiado rápido, demasiado vacío, demasiado injusto, demasiado...