martes, 20 de noviembre de 2012

...creo que tenemos un problema.

Vuelvo a tener esa maldita sensación. Es como si algo me apretase en el pecho y me impide respirar bien, es entonces, cuando todo ese aire que no puede tomar su camino, decide ascender y convertirse en lágrimas derramadas por mis ojos. No es la primera vez que me ocurre, pero quizás puede que sea la última, y eso, eso es lo que más miedo me da. Cuando dábamos un paso atrás, o había un pequeño roce, cuando nos distanciábamos un poco, me ocurría lo mismo que ahora, pero esta vez es diferente. Lo pienso y más se emborrona la pantalla... Es como querer avanzar y no poder, porque delante de mi tengo un muro de acero infranqueable, pero ahora, parece que ese muro ha doblado su grosor. 

Pensaba que estábamos cerca, que el hecho de medir todas las palabras y gestos no era más que una medida de "autodefensa" contra el miedo que nos provocaba que lo más mínimo hiciese explotar todo sin control, que en realidad la distancia no era más que parte de nuestra imaginación y estábamos tan cerca, que estirar el brazo supondría encontrarme con el roce de tu piel y que por esa razón, cuando crece el abismo tengo la necesidad de sentir tu presencia aunque sea lo más mínimo, y que a ti te ocurre lo mismo y por eso, cuando el muro se vuelve opaco y no me ves tienes todos esos gestos... Puede que esté siendo una estúpida y todas esas evidencias que creo ver, no sean mas que meros espejismos en medio de la nada, que sean imaginaciones mías, pero si es así, no le encuentro sentido a otras muchas cosas.

La cuestión, es que me siento tan derrotada, tan cansada de que seamos incapaces de salir de este maldito bucle, que ya, no tengo fuerzas, ni ganas, ni de tirar de ti, ni de mi, ni de nosotros. Siento que el abismo poco a poco crece y a medida que lo hace, avanza sin importarle lo que pisa a su paso y está destrozándolo todo. Por eso, me da tanto miedo, porqué sé, que si me dejo ganar por la desilusión, el abismo se comerá parte de nuestra felicidad, sé, que dejaremos que el futuro consista en dejarnos llevar por otros cuerpos, otras mentes, pero en el fondo continuaremos pensando en lo que pudo ser y dejamos escapar. El abismo nos está ganando el terreno, por primera vez me está ganando el pulso. 

Si tu no tiras y luchas para plantarle plantas cara... creo que tenemos un problema.    


1 comentario:

  1. Luchar duele, pero lucha por lo que quieres, porque perder algo tan necesario como el aire que respiras no duele... mata.

    Perder tus ilusiones y ver que todos tus sueños caen a un profundo abismo hace que tú también caigas con ellos y, si no luchas por salir y recuperarlos, es posible que encuentres alternativas (nuevos sueños y velas que te alumbren ahí abajo), pero nunca sabrás lo que podría haber ocurrido si hubieses intentado luchar por lo que realmente querías una vez más.

    Muchísimos ánimos, preciosa... Un abrazo enorme.

    ResponderEliminar