sábado, 19 de mayo de 2012

Si quieres, te miento.

Si quieres te miento y te cuento que confío plenamente en todas las personas de mi alrededor, o que, los días ahora se me hacen más cortos y todo es mucho más fácil de llevar. Si quieres puedo seguir con la lista de mentiras, y sumarle que no echo de menos nada ni a nadie, y mucho menos a él, está claro, o te digo que todo ha sido malo y ningún cambio ha sido para mejor...

Realmente, no sé que contarte ni sé que quieres saber. No es el tiempo el único loco que tan pronto absorbe los minutos bajo los rayos de un sol abrasador como que los devora bajo el frío vacío de espesas nubes que hoy han decidido volver a llorar... Llorar... si al menos hubiese sido capaz de hacerlo hubiese podido desahogarme, deshacerme del peso de la rabia, la impotencia y la estupidez... 

Pero al contrario que tú, soy incapaz de mentirte. ¿Confiar? ¿En quién? Sinceramente, me sobran demasiados dedos de la mano para contar en quién poder apoyarme cuando el suelo se tambalea bajo mis pies. Ha aumentado el vacío, porque tu espacio es imposible de llenar de la noche a la mañana, y por mucho que otras carencias ahora estén cubiertas, el abismo a mi alrededor es tan inmenso que creo que esa melodía de fondo es el latido de mi corazón... Por supuesto que me alegro de que al menos, ahora sean cuatro palabras las que vayan abriendo el camino, sería estúpido no alegrarme de en parte, recuperar el motor de encontrarme a mi misma... 

Pero sigo sin saber, de que me sirve todo esto, de que me sirve la rabia, de que me sirve el dolor, si tú, seguirás comiéndote los minutos como si nada hubiese pasado, como si nada se hubiese acabado. ¿De qué me sirve sentir el vacío? Tú llenarás los huecos sumergiendo tus sentimientos de acero bajo espesas nubes de humo que taponen tus heridas... Las verdaderas causantes de que todo haya llegado al fin.

2 comentarios:

  1. Tranquila, todo eso pasará y, al final, las nubes no serán tan negras. Lo mejor que podrías hacer es relajarte y sentarte a esperar que algo de tu rutina cambie, que alguna amiga te ayude.
    Es lo mejor.

    Un beso.

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  2. Bueno, tu ya sabes donde estoy esperándote siempre que necesites venir corriendo a desahogarte... sabes mi opinión sobre el tema, y sabes mi reacción al respecto! Nunca, nadie, se merece hacerte daño, por poco que sea... porque siempre eres tú la que estás ahí... Creo que algún día, debe ocurrir que alguien siempre esté ahí cuando tú lo necesites! y no ser la única que tú puedas ayudarte a levantarte y sostenerte. Que aunque yo esté ausente, puedes apoyarte en mí con todo tu peso. Porque no hace falta decirte que yo te ayudaré con el peso, y cargaremos juntas!!!! Porque la gente que no sepa cómo eres... y si lo sabe, se digna a perder la vergüenza en mirar hacia otro lado... ahí tienen en mi blog lo que tú eres... y que nada ni nadie podrá encontrar a alguien mejor que tú. LO VALES y hazte a la idea. Te quiero!!!!

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