martes, 22 de noviembre de 2011

Perfecto punto medio

Hoy ha vuelto a amanecer un día gris, amenazaba lluvia una vez más, y había que volver a clase. Todo pintaba a rutina. Pero algo ha cambiado...

















...nuevas sensaciones... completamente nuevas, pero lo más importante es que me gusta. De la misma forma que me gusta el haber llegado a este punto. Puedo decir que es un perfecto punto medio, el que se puede hablar sin que haya malos entendidos, en el que si uno de los dos cae, el otro está ahí, en el que la complicidad es la clave.
Hacía demasiado tiempo que no me caía, y anoche lo hice. Demasiados cambios a mi alrededor, pero sobre todo el peso de uno de ellos, sin duda el más importante, aunque a la otra parte siempre le haya parecido algo sin importancia, aunque nunca lo haya valorado... ha sido lo que ha hecho que no pudiese más, y que sin venir a cuento, las lágrimas empezasen a recorrer mi rostro. Pero no estaba sola. Ahí estaba el, y estaban sus pequeños detalles, sus palabras, sus gestos, sus risas, el sacar a flote nuestros problemas, el sincerarnos, el poder desahogarnos juntos, hacer planes y contarnos mil batallas.
Me gustan sus pequeños, pero enormes detalles, me gusta su sonrisa, me gusta el que forme parte de mi vida, me gusta que hayamos sido capaces de llegar a este perfecto punto medio. Me gusta que no formemos parte de ese enorme grupo que necesita etiquetas. Me gusta no esperarme nada y tenerlo todo. Su olor, sus besos, sus abrazos, sus piques. Me gusta que haya sido la pieza que ha roto mi rutina.

2 comentarios:

  1. Y a mi me gusta que estés tan feliz. Las etiquetas no son necesarias, sólo los sentimientos :)

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  2. Como bien has dicho.. las etiquetas no lo son todos!!! los sentimientos son los que da los nombres. Y si tu eres feliz, yo también :) teQ

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