Ahí fuera hace demasiado frío, recuerda que aquí el otoño y la primavera deciden pasar de largo. Dejan que el verano y el invierno se explayen, convirtiéndose en los más fieles compañeros de nuestros días. Pero por muy bajas que sean las temperaturas, no volveré a sentir el frío que quedaba con la ausencia de tus abrazos. Sí, te echo de menos. Pero me he dado cuenta de que no sirve de nada aferrarse al recuerdo de aquellos momentos en que aparentabas ser quién no eres en realidad. Y es que por mucho que nos empeñemos en cambiarlo, el invierno siempre será invierno.
La vida fluye entre frases de canciones, días de sol o lluvia, y viajes entre las páginas de los libros, aportándole motivos para soñar. Hay sueños y sentimientos que si nunca ven la luz, ni sienten el calor del sol, formarán a pasar parte de recuerdos olvidados que tarde o temprano acabarán congelándose de tal manera que nadie se acuerde de ellos. Los elegidos tendrán el privilegio de transformarse en textos que inunden tu mirada.
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